Existía algo en su sonrisa, en sus ojos, y en su elegancia natural.

Esto fue escrito por Audrey Hepburn, cuando le pidieron que compartiera los secretos de su belleza.

Para tener unos labios atractivos, dí siempre  palabras amables.

Para tener ojos adorables, mira siempre las cosas buenas de los otros.

Para una figura esbelta, comparte tu comida con los que padecen hambre.

Para tener un cabello lindo, permite que un niño o niña pase sus deditos por él por lo menos una vez al día.

Para mantener la elegancia, camina con la certeza de que Dios está a tulado.

Recuerda, si necesitas una mano amiga, la encontrarás en el extremo de cada uno  de tus brazos.

Con el tiempo y la madurez, descubrirás que tienes dos manos: una para ayudarte a tí misma y la otra para ayudar a los demás.

La gente, más que las cosas, tiene derecho a ser reestablecida, revivida, reivindicada y redimida; Nunca rechaces ni deseches a nadie.

La belleza de una mujer no estáensufigura, en la ropa que viste o en la forma como se peina. La belleza de una mujer se descubre en sus ojos, por que son la puerta de su alma, el lugar donde habita el Amor.

Aunque parezca extraño, la belleza de una mujer crece con el pasar de los años.

No hay otra como tú

Dios te quiere tal como te hizo.

 A Sus ojos eres la mujer más hermosa.

Oración

Pudiste haberme hecho una mujer perfecta según el concepto de la perfección humana. Sin embargo, no lo hiciste, Señor. Más bien me creaste tal como querías que fuera, y me dotaste de perfección a tu manera. Acógeme ahora, tal como soy, en tu corazón.

 Amén.